La autora señala en la nota final de su obra que su objetivo es emocionar y a mí me ha parecido una novela emocionante. La historia de Xenia y Eric te atrapa desde el comienzo, siempre admiro a los escritores que saben mantenerte pegado a sus obras. Una historia que parece tan real como la vida misma y que, además, transmite una serie de valores y enseñanzas importantes: los peligros de Internet, la importante labor de la familia en la educación de los hijos, la empatía con situaciones que nos encontramos todos los días los docentes y, el amor a la lectura, algo esencial para formar a jóvenes con criterio. Por tanto, no puedo dejar de recomendar esta novela a toda la gente, tanto adultos como jóvenes, a estos especialmente por todo lo expuesto en esta reseña. Gracias, Care Santos, porque transmites un humanismo fundamental en el mundo en que vivimos. ¡Ah!, por cierto, a mí también me impactó "El guardián entre el centeno" cuando lo leí y me he sentido identificado con la bibliotecaria que recomienda los libros al protagonista.
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